Paita, Perú, mediados de 1970, la noticia de la nave Puelche bajo bandera panameña y que se encuentra perdida y a la deriva en alguna parte del vasto litoral peruano es noticia en el país y Paita no es ajena a la zozobra que provoca el incierto destino de la embarcación y la suerte desconocida hasta entonces de su tripulación.
puelche. Relativo a un pueblo indígena que habitó en la región central de Argentina, desde el sur de la provincia de Mendoza hasta el sur de la de Santa Fe. adjetivo · nombre común[persona] Que pertenecía a este pueblo. El Viento Raco, o también llamado Puelche, es un viento catabático, es decir se origina en un enfriamiento de aire en el punto más alto de los valles andinos. … La geografía de la zona central impide que este viento alcance demasiada velocidad o peligro como ocurre en otros casos en el mundo.
Puelche (del mapudungun: pwelche, que significa “gente del este”) es uno de los pueblos indígenas que habitaba los valles cordilleranos de Chile y al este de la cordillera de los Andes en el Puelmapu (actual territorio argentino). Todas estas referencias para clarificar el nombre de la nave que si bien era de propiedad de un armador chileno navegaba bajo la bandera de conveniencia panameña, el origen del nombre de la misma puede encontrarse al inicio de este artículo.
A continuación, reproducimos el reportaje que hizo entonces el diario el Comercio sobre la odisea que se vivía en alta mar.

“Sin agua ni víveres y por añadidura al garete; es decir, sin rumbo, se encuentran desde el 7 de agosto, 18 tripulantes entre ellos una mujer embarazada, que viajaban desde Panamá hasta Talcahuano (Chile) y que se calcula están a 280 millas de la costa en dirección noroeste del Callao, probablemente frente a Salaverry (La Libertad)”, con estas líneas comenzaría la cobertura periodística de El Comercio de uno de los rescates en alta mar más sonados de los años 70.
La noticia se conoció el 12 de agosto de 1970 cuando una bolichera peruana encontró, frente a las costas de Pacasmayo, un bote salvavidas con cuatro tripulantes a bordo, quienes manifestaron pertenecer al buque mercante ‘Puelche’, de bandera panameña, que estaba a la deriva desde el 29 de julio.
Ramón Cornejo, Juan Llanca, José Darío Maselli y Marco Antonio Fernández, de entre 26 a 32 años, refirieron a las autoridades de la capitanía del puerto de Pacasmayo, que ellos se ofrecieron para buscar ayuda en uno de los botes salvavidas. Sin embargo, el viento y la corriente hicieron que perdieran el rumbo.
“La tripulación se encuentra hambrienta, sin agua y sin medios de comunicación. Hemos estado a la deriva por más de 130 horas en el mar, en un pequeño bote, muriéndonos de frío y en peligro, hasta que fuimos recogidos por una bolichera peruana frente a Etén, pero nos llevaron hasta Pacasmayo”, declararon a los periodistas que llegaron hasta esta localidad norteña. Además, creían que cuando dejaron la nave, esta se ubicaba casi frente a Huacho.
Los motores del ‘Puelche’ habían fallado ocasionando la paralización de su grupo electrógeno por lo que no podían comunicar su situación a tierra. Pero mediante un aparato receptor que funcionaba a pilas podían escuchar las radios limeñas Unión, Del Pacífico y Mar.
Aprovechando esta información, las autoridades pidieron a la tripulación perdida que coloquen sábanas blancas en cubierta para que puedan ser avistados por los aviones de rescate de las bases de la FAP en Chiclayo y Piura. El mercante ‘Puelche’ no salió en perfectas condiciones de Valparaíso (Chile) cuando partió hacia Panamá y frente a Coquimbo quedó por primera vez al garete. Solucionado el problema continuaron rumbo hacia Perú demorándose 18 días en vez de una semana, que era el tiempo normal de viaje. Estas declaraciones las hizo Reinaldo Ortega Rojas, miembro de la tripulación que fue desembarcado en Paita por medidas disciplinarias.
Además, aseguró que la tripulación pasó dificultades por falta de alimento y dinero. Al desembarcar en el Callao tuvieron que vender sus pertenencias para comprar comida. A pesar de las dificultades llegaron a su destino. Periodistas de El Comercio ubicaron en Lima al dueño del ‘Puelche’ Pablo Klimper quien declaró que su hijo Pablo Klimper Isla, de 21 años, estaba a bordo.
El empresario confiaba en la experiencia de la tripulación para sobrevivir y en los 47,000 litros de agua, cantidad suficiente para 47 de días de viaje además de la madera que podían usar para calentarse durante meses. El viaje de regreso a Talcahuano (Chile) comenzó el 14 de julio. El viejo barco llevaba 30 toneladas de carga cuyo contenido hasta ese momento se desconocía. Aviones “Canberra” de la FAP peinaron la costa entre el Callao y Piura a 280 millas mar afuera. La Marina tenía listo su remolcador Guardián Ríos en la Base Naval del Callao para zarpar ni bien se encontrara la nave. Pero las horas y los días pasaban y no había rastro del Puelche.
Con radares de largo alcance los buques de la Armada Peruana buscaban en alta mar la embarcación que ya llevaba 23 días desaparecida. No había novedades en los últimos despachos enviados por los destructores BAP Castilla y BAP Aguirre. La Fuerza Aérea Ecuatoriana se sumó a la búsqueda sobrevolando las islas Galápagos, considerado uno de los puntos donde podía estar la nave. Mientras tanto a bordo del ‘Puelche’, la tripulación del ‘Puelche’ comenzaba a desesperarse. Ya no se escuchaba el sonido de los aviones ni se veía a lo lejos los buques. Una de las grandes preocupaciones era que se adelantara el parto de la joven embarazada Mariluz Gonzales. Por ello el capitán Fernando Guzmán Loezar y seis tripulantes más decidieron buscar ayuda.
El riesgo era grande, pues el bote salvavidas estaba en mal estado. El 22 de agosto se despidieron de sus amigos. Pasaban las horas y no avistaban tierra. Tampoco lograron pescar y solo se alimentaban con arroz que había llevado el cocinero Rodolfo Ávila Sánchez. Pero su suerte cambiaría al amanecer del 27 de agosto cuando el contramaestre de la nave Víctor Vera Espinoza divisó los mástiles del ‘Victoria Ocho’, embarcación ballenera de bandera japonesa. “Grité con todas mis fuerzas para despertar a todos que como impulsados con un resorte se incorporaron”, declaró Vera cuando fue recibido por periodistas y pobladores en el puerto de Paita, a donde fueron trasladados para recibir atención médica. En cuestión de horas dos buques de la Marina de Guerra ubicaron al carguero panameño. Con gran dificultad, debido al peso y la fuerza del mar, comenzaron la ardua labor de remolcarlo.
Para el 31 de agosto el BAP Aguirre, que tomó la posta del rescate, fue avistado en el puerto de Paita remolcando al viejo carguero. Las imágenes tomadas por nuestro reportero gráfico José Martínez muestran el preciso instante en que los seis tripulantes, entre ellos Mariluz Gonzales con siete meses de embarazo, pisaban tierra firme. Entre abrazos y lágrimas fueron recibidos por sus compañeros.

El ‘Puelche’ transportaba 2,250 cajones con whisky; así como, 50 cajas de cigarros, camisas, juguetes, televisores y artefactos eléctricos. Aunque ninguno de los 18 tripulantes se enfermó durante su periplo en alta mar, el rescate por grupos fue los mantuvo en zozobra porque no tenían forma de escuchar las noticias por falta de electricidad. Después de 32 días perdidos en alta mar, la tripulación tenía muchas historias que contar como la improvisada votación para presidente de Chile. Con el permiso del capitán, también chileno, tres tripulantes instalaron una mesa de sufragio para votar por sus candidatos. Concluido el acto electoral, los tres ciudadanos chilenos entonaron el himno de su país y echaron botellas al mar con sus votos. Sus compañeros de otras nacionalidades siguieron con respeto el proceso.
El ingeniero ecuatoriano José Gallegos Vásconez informó que el motor se apagó debido a que una tubería de abastecimiento de petróleo se rompió. “Cuando intentamos poner en funcionamiento el motor después de reparar la avería, las dos baterías del barco no respondieron”, dijo Gallegos. Agregó que el tripulante encargado de recargar las baterías se confió demasiado y no verificó su estado. La tripulación manifestó su deseo de continuar su viaje hacia el sur cuando los daños hayan sido reparados.
Comentario de nuestro amigo Manuel Herrera Rambla
El famoso PUELCHE”….Chileno por cierto.
Bueno recuerdo que estuvo en PAITA y luego zarpó y naufragó por varios días (no sé exactamente cuántos), pero era el comentario en Paita.
Recuerdo que tenía tripulación de varios países, entre ellos un ecuatoriano y una “camarera” chilena que se hicieron pareja.Bueno pasado el tiempo los ubican y traen de regreso a PAITA, y verán se comentaban una serie de aventuras que tuvieron para sobrevivir, estaban en medio del océano como se dice “a garete”, sin rumbo.
Cuando llegaron a PAITA recuerdo la algarabía de la gente, todos se agolparon hacia la playa (Toril), por el malecón hacia ENAPU….el sonar de las ambulancias, movimiento de los de Capitanía, ” llegaron los náufragos” vociferaba la gente y todos querían verlos, como digo toda una novedad.
Lo cierto y que rescato es que la “chilena ” como se le llegó a conocer estaba en cinta y dio a luz me parece a un chico que le pusieron FRANCISCO por San Francisco patrón de PAITA, estuvo un tiempo viviendo en PAITA ( me parece por La Figura) y luego es que tiene otra hija mujer y llamaron Mercedes por la Virgen, en agradecimiento a qué fueron rescatados.,(por cierto la chilena era simpática de pelo corto)luego hay un tiempo que se va, pero más adelante regresa y radicó en PAITA por mucho tiempo, ya todo mundo la conocía.
No recuerdo mucho el año exactamente.
Los dueños de esa embarcación no creo equivocarme era un Sr.KIMPER ó KLIMPER (algo así), recuerdo que este Sr. llegó a PAITA cuando los encontraron y se hospedaba en el Hotel Miramar y si mal no recuerdo ya era administrado por Sr Carlos Zapata.
Bueno ya después de un tiempo se va el PUELCHE, pero igual pasado un tiempo vuelve a regresar el famoso PUELCHE, ya está vez zarpó de PAITA y lo último que se supo fue que encalló no sé el lugar exacto, pero ahí terminó el PUELCHE.
Artículo original: El Puelche- El Comercio
‘, ‘El Puelche’,