Por supuesto que sí, siempre lo hemos tenido, el potencial existe, aunque algunos que deberían saber y conocer más del tema no se han quitado el velo de sus ojos o han vivido en una ignorancia supina muy conveniente. Aquí expongo algunas ideas sobre el potencial desperdiciado de nuestro puerto.
Las calles y casonas del centro de Paita son uno de los últimos rezagos de la arquitectura republicana del último tercio del siglo XIX en el norte del país, para nuestra fortuna, aún tenemos la dicha de encontrar gran parte de los balcones que siguen siendo motivo de admiración para aquellos que llegan por primera vez a la ciudad, lamentablemente el Jr. Junín, sector emblemático de nuestra ciudad sigue a su suerte y en absoluto abandono, tenemos la joya del Miramar (antigua Casa Raygada) que bien podría ser adquirido por el estado y serviría a la perfección como un gran museo y/o centro histórico que haga honor a nuestra ciudad.
No debemos pasar por alto la falta de un museo, centro histórico o cultural, nuestra sociedad vive en una absoluta orfandad de espacios donde se cuide de nuestra historia y los ciudadanos se nutran de su propio legado. Me apena de sobremanera notar como nos desgañitamos hablando de la grandeza de Grau y de su origen y no somos capaces de abocarnos a la tarea de crear un museo histórico a su nombre, siempre debo señalar a las autoridades que ni promueven ni impulsan ideas sobre este tema pendiente con la memoria del héroe paiteño.
El malecón actual, que debe ser la conexión entre el ciudadano y su mar, se ha tugurizado de manera absurda y con la escandalosa anuencia de las autoridades municipales que siguen sin dar la talla en el manejo de los espacios públicos. Una obra que fue construida ni siquiera hace 20 años y no obstante una falta de visión y tino arquitectónico lo que lograron fue, impedir la vista al mar con construcciones que amén de invadir un espacio que debe ser dedicado a la observación atraen la proliferación de ventas callejeras, juegos que se asientan por largo tiempo, hoy en día gran parte de la playa se encuentra sin control alguno, se ha convertido en un parqueo de autos a la libre. La Municipalidad no ejerce su supuesta autoridad para mantener ni el orden, ni resguardar el buen uso de los espacios públicos.
Tenemos nuestra antigua aduana que se cae a pedazos por la inopia e inacción de quienes tiene nuestro destino en sus manos, que si alguien retomara su reconstrucción o nueva edificación, podría de manera idónea servir de un área turística bien definida con el muelle y una plataforma adicional que se le puede ganar al mar donde se encuentran las ventas de ceviche, incorporando a estos comerciantes con un compromiso claro de reglas claras y cuido y solamente en concesión, renovable en cuanto cumplan con los requisitos de exigencia, el muelle hoy en día llamado eufemísticamente “turístico” pues es solo una tapadera porque su función real es de centro de abastecimiento para gran parte de la flota artesanal.
Esta misma área conectaría con el sector de la punta desde la plazuela Grau hasta las inmediaciones de la ex-33.
No olvidemos el sector de ingreso con el Mirador que requiere aún de mejor acondicionamiento y que sin duda es un punto alto en lo que respecta a lugares importantes en un pequeño tour citadino.
Muchas cosas se podrían realizar para impulsar de manera seria y sostenible un turismo, sector que languidece sin ningún tipo de apoyo, el efecto de estas acciones podría tener un efecto multiplicador si se aplica una zonificación correcta y reglas adicionales como control de polución visual y sónica, mejora de áreas peatonales y control de tráfico de motorizados.
Consideramos que hay muchas cosas que se pueden hacer sin inversiones exorbitantes, sino con planificación y articulación adecuada con otras entidades, por ahora todo esto queda en un cúmulo de ideas que no se podrán llevar a la práctica mientras no exista otro proyecto político serio y responsable, esperaremos con paciencia un par de años más ver si la luz de un liderazgo fuerte pueda alumbrar nuevamente a los paiteños.
De momento sigamos vigilantes y críticos con quienes prometieron el oro y el moro, pero no pasan de acciones irrelevantes para un desarrollo verdadero.
Algunas imágenes ilustrativas de la situación actual y permanente
El discurso de rigor de las autoridades que no se traduce en hechos ni relevantes ni siquiera de impacto real.




